
muy claras, pero últimamente es como si mi vida se desmoronara a cada instante, como si en ciertos momentos fuera incapaz siquiera de reconocer a la persona del otro lado del espejo. La gente lo llama madurar, pues bien madurar apesta. Ya ni siquiera puedo confiar en los que se suponía que eran mis amigos, porque todo el mundo esta muy ocupado preocupandose de sus propios problemas para levantar la cabeza medio segundo y ver que no tienen los peores problemas del mundo que con el tiempo todo pasara y se darán cuenta de lo estúpidos que fueron, además se disculpan con un "eres mi amiga se supone que lo

que están por debajo. Solo unos pocos somos diferentes, esos pocos tenemos dos opciones: auto compadecernos porque nunca llegaremos a nada hasta que encontremos la forma de convertirnos en un de esos idiotas sin corazón o hacer las cosas a nuestra manera y dejar de creernos lo que esa panda de descerebrados nos diga. No es una elección fácil, es decir, quien no ha queirdo alguna vez estar rodeado de lameculos aduladores que le digan lo guapo que es o lo mucho que destaca, pues sinceramente yo, para que quiero mil personas que digan lo fantástica que soy si no es verdad, ¿de que sirve? Para alimentar mi ego, mejor no esta bien como esta. Creo que esta claro que yo tome mi elección hace tiempo. Yo elegí ser yo misma, no importa si es me hace una friki o simplemente una tía rara que necesita desahogarse de ver en cuando en un blog, es lo que soy y aunque sigo sin saber muy bien quien soy si que se quien no soy: no soy una de ellos.
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